Este viernes, en su conferencia de prensa matinal, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), anunció que, tras un acuerdo con su par estadounidense, Donald Trump, México finalmente se sumará al plan de reducción de la producción petrolera global, acordado un día antes entre países OPEP y aliados no OPEP, mediante videoconferencia.
Los socios petroleros se han propuesto, después de las fracasadas conversaciones de marzo último y la pandemia de Coronavirus presente en 181 países, recuperar precios que han tocado mínimos históricos de principios de este siglo, y así avanzar hacia una estabilización del mercado energético, tocado especialmente por la emergencia sanitaria mundial que ha desatado la Covid-19.
De modo que la estrategia trazada sigue siendo asignar cuotas de reducción a cada país, según los respectivos niveles de producción. Entre todos disminuirán durante mayo y junio 10 millones de barriles de crudo por día; es decir, la producción bajará de 43,8 millones de barriles a 33,8 millones de barriles. En el caso de Rusia y Arabia Saudita, durante estos dos meses, ambas potencias petroleras reducirán su producción en 2,5 millones de barriles por días desde el nivel de 11 millones de barriles diarios.
A partir de junio y hasta diciembre la reducción total será de 8 millones de barriles día y entre enero de 2021 y abril de 2022 será de 6 millones de barriles.
Hasta el último momento del encuentro virtual, México se mostró reticente a aceptar; no obstante, López Obrador informó este viernes que decidió cambiar de parecer, luego de haber conversado con Trump y haber acordado que México reducirá en 100 mil barriles días su oferta y Estados Unidos asumirá los 250 mil barriles restantes, para cumplir con lo solicitado por la OPEP+ a México. “México va a contribuir a estabilizar los precios que se desplomaron en los últimos días. Siento que fue bueno el acuerdo”, confesó AMLO a los periodistas y explicó que su oposición se debió a que a México le ha costado demasiado recuperar su producción, muy afectada por desastrosas políticas energéticas de las gestiones precedentes.
La coyuntural alianza de Trump con López Obrador, da cuenta del interés que ahora Estados Unidos demuestra en recuperar precios sostenibles de producción, después que ha inundado el mercado con su petróleo de esquisto, a través de la fracturación hidráulica. ¿Acaso un favor que luego Trump cobrará caro a su vecino del norte? ¿Ahora sí Estados Unidos empieza a sentir las consecuencias de precios muy bajos de venta?
La próxima reunión del grupo está pautada para el venidero 10 de junio.
Celebro el histórico acuerdo alcanzado entre los países de la OPEP+, con ello contribuimos a la estabilidad del mercado petrolero y la recuperación de la economía y las finanzas mundiales. Felicito a todas las delegaciones por su gran capacidad de diálogo y entendimiento. pic.twitter.com/SLcO3IzSne
— Nicolás Maduro (@NicolasMaduro) April 10, 2020