El presidente de la República, Nicolás Maduro, concedió una reveladora entrevista al reconocido periodista y escritor Ignacio Ramonet, días después de participar en una actividad oficial en el estado Aragua. En esta importante conversación, el mandatario abordó directamente las serias amenazas que el Gobierno de Estados Unidos dirige contra Venezuela.
El Presidente enfáticamente afirmó que el país está preparado para cualquier eventualidad que surja, y al mismo tiempo, denunció la existencia de planes de “falsas banderas” que sectores de la oposición y actores externos organizan para justificar una escalada.
Maduro directamente señaló a la autodenominada “extrema derecha” venezolana, a la cual calificó como “desleal” y “vendepatria”. Ellos han intentado colaborar con intereses extranjeros para desestabilizar la nación. De hecho, reveló que en octubre pasado, los cuerpos de seguridad descubrieron un peligroso plan que involucraba el uso de explosivos contra la embajada de Estados Unidos en Caracas. Ese plan buscaba culpar automáticamente al Gobierno venezolano y, como consecuencia, provocar una escalada militar.
Además, el Jefe de Estado mencionó la reciente captura de tres mercenarios en Trinidad y Tobago. Las investigaciones actualmente los vinculan con la CIA, pues presuntamente planeaban un ataque cuyo propósito era generar una respuesta armada contra Venezuela. Asimismo, el Presidente recordó episodios pasados, tales como los violentos sucesos de Puente Llaguno en abril de 2002 y el atentado en la Plaza Altamira en diciembre de ese mismo año.
En retrospectiva, calificó ambos eventos como operaciones de “falsa bandera” que buscaban justificar acciones agresivas contra el chavismo. Por consiguiente, el Gobierno mantiene una postura de máxima alerta ante estos intentos persistentes de injerencia.
Análisis Geopolítico: La pugna por la hegemonía
Ramonet consultó a Maduro sobre la creciente agresividad de Washington. El Presidente sostuvo que esta conducta simplemente representa un intento por reposicionar a Estados Unidos como potencia hegemónica global. Sin embargo, este intento ocurre en un contexto internacional que ha cambiado drásticamente con el ascenso de China y el fortalecimiento del bloque de los Brics.
Maduro explicó que la Casa Blanca y el Pentágono buscan desesperadamente reafirmar su dominio sobre América Latina y el Caribe, región que históricamente han considerado su “patio trasero” bajo la anacrónica Doctrina Monroe. Por lo tanto, las amenazas sistemáticas que dirigen contra Venezuela constituyen un mensaje político de fuerza para todo el continente. No obstante, el Presidente reafirmó su convicción de que el nuevo orden internacional es irreversiblemente multipolar y que el “Sur Global” se ha consolidado definitivamente como un actor clave.
A pesar de este asedio, Maduro reiteró su voluntad de diálogo. “Nosotros estamos listos para dialogar y defender la paz”, afirmó. Al mismo tiempo, denunció una renovada campaña de presiones, calumnias y amenazas, esta vez bajo el pretexto del “narcoterrorismo”. “Es una narrativa nueva, pero en el fondo es lo mismo de siempre: un pretexto para asesinar una esperanza”, concluyó.
Recursos estratégicos y la firme resistencia
Maduro advirtió que el objetivo final de Washington es recuperar el control sobre los vastos recursos estratégicos de América Latina incluyendo petróleo, gas, cobre, litio, tierras raras y agua. A pesar de esto, insistió en que “el tiempo de la historia no da marcha atrás” y que los pueblos de la región mantienen un inquebrantable anhelo de libertad y soberanía.
El mandatario subrayó que Venezuela, a pesar de todas las amenazas, está plenamente preparada para cualquier escenario que se presente. Si bien su prioridad absoluta sigue siendo la paz, el país no cederá. «Rezo para que eso no ocurra”, finalizó el Presidente.
Esta profunda entrevista con Ignacio Ramonet sirve para ratificar la postura de resistencia y soberanía del Gobierno venezolano ante las crecientes tensiones geopolíticas.
