Mientras que en Venezuela el presidente Nicolás Maduro está proponiendo planes para transformar la educación en favor del pueblo, Argentina sigue padeciendo el Efecto Milei con la segunda marcha universitaria que reclama justicia para el estudiante.
La comunidad educativa de Argentina marchará este miércoles contra el desfinanciamiento de la universidad pública. Será la segunda protesta masiva del sector contra las políticas de ajuste del gobierno de Javier Milei.
Estudiantes, docentes y gremios convocaron a la movilización frente al Congreso de la Nación, en Buenos Aires, aunque habrá marchas en otras ciudades del país, como Rosario, Córdoba, Mendoza, entre otras.
Diversas organizaciones decidieron llamar a la manifestación, luego de que Milei anunciara que vetará la Ley de Financiamiento Universitario, que había sido aprobada en el Senado y que buscaba actualizar las partidas presupuestarias de las universidades nacionales.
Situación de pobreza
El vicerrector de la Universidad de Buenos Aires, Emiliano Yacobitti, denunció que actualmente «más del 60% de los trabajadores universitarios son pobres».
«Espero que el respaldo de la sociedad (a la marcha) sea masivo y haga recapacitar al presidente y a los diputados» que avalaron el veto de Milei a la ley de reforma jubilatoria, dijo Yacobitti en una entrevista con Futurock.
En la semana previa a la manifestación, el Ministerio de Capital Humano emitió un comunicado para informar que los gremios del personal docente y no docente de las universidades nacionales rechazaron un «histórico ofrecimiento» de un 5,8 % de aumento salarial adicional en octubre, que se sumaba al 1 % ya establecido para el personal.
El Gobierno defendió su gestión haciendo hincapié en el «enorme esfuerzo del Estado por reconocer la labor universitaria y del incremento en los gastos de funcionamiento del 270%» y los «49.000 millones de pesos (unos 56,7 millones de dólares) adicionales para los hospitales universitarios que otorgó la gestión», luego de la protesta de abril. Los representantes de los trabajadores calificaron la oferta de «insuficiente».
Por su parte, el secretario de Educación, Carlos Torrendel, acusó a las universidades de «inventar alumnos» para «multiplicar cargos docentes», y afirmó ante Radio Rivadavia que la marcha «es política».
También se refirió al tema el vocero presidencial, Manuel Adorni, en su rueda de prensa del martes, un día antes de la movilización. «El Gobierno no está en contra del reclamo, en tal caso, de lo que sí estamos en contra es que el Congreso sancione leyes que no tengan una partida presupuestaria asignada, o sea que sean leyes que no puedan básicamente financiarse», manifestó.
«La intención efectiva que tiene este Gobierno es de mejorar la situación de las universidades públicas que se viene agravando año tras año durante muchísimo tiempo», dijo Adorni. Y añadió que resolver los problemas que arrastran las casas de altos estudios «va a llevar años de intenso trabajo».
Veto total
El pasado 13 de septiembre, el Parlamento avaló la norma impulsada por la Unión Cívica Radical, con 57 votos a favor, 10 en contra y una abstención. La medida no solo tuvo un respaldo casi unánime en el Poder Legislativo, sino que además es reclamada por toda la comunidad educativa.
Sin embargo, ese mismo día, el presidente Milei confirmó desde sus redes sociales que aplicaría un «veto total» contra la ley de presupuesto universitario. La decisión se debe a que, según el mandatario, ampliar el presupuesto de la universidad pública choca contra su objetivo de alcanzar el «déficit cero» en su administración.
El presidente Milei esperaba hasta último momento para cumplir con su palabra y anular la ley de financiamiento. El jueves es el último día que puede hacerlo.
Esta será la segunda Marcha Federal Universitaria desde el inicio de la gestión de Milei, en diciembre del 2023. La anterior, realizada el 23 de abril, se convirtió en el desafío más importante que enfrentó en la calle el líder libertario, casi cuatro meses después de llegar a la Presidencia.
Agencias.