Fue suspendida la audiencia prevista para el día 7 de enero, correspondiente al caso del diplomático venezolano, Alex Saab, retenido en territorio estadounidense; de acuerdo con la información que divulgaron voceros de la justicia en el país norteamericano.
En este sentido, los responsables del caso atribuyeron la medida a los embates que sufre esa nación en medio de los rebrotes de coronavirus en la nueva etapa que viven por la pandemia. Se estableció como próxima fecha el venidero 16 de febrero.
«Teniendo en cuenta el aumento de la covid, si la audiencia se llevara a cabo el 7 de enero, el acusado tendría que estar en cuarentena durante 14 días después de la audiencia, lo que interferiría con su capacidad para consultar con un abogado», expresa la declaración que divulgaron medios y agencias internacionales.
El pronunciamiento corresponde al juez Robert Scola, el mismo que desestimó a principios del mes siete cargos de lavado de dinero contra el representante del Gobierno Bolivariano de Venezuela. Se trataba de un procedimiento denominado «audiencia de estatus».
Conveniente para EEUU que a unas horas de la audiencia de Alex Saab, esta haya sido postergada hasta el 16 de Febrero por "cuarentena"..Siguen SIN pruebas y esto les sirve para ganar tiempo, seguirán tratando de forzar una "confesión" redactada por los SECUESTRADORES
— polemicas (@polemicas1) January 5, 2022
El pretexto de EE.UU.
Sobre la postergación de la audiencia al diplomático venezolano Alex Saab, usuarios y usuarias en redes sociales coincidieron en la opinión; según la cual todo forma parte de una maniobra dilatoria del gobierno de Estados Unidos. Todo esto debido a la falta de pruebas para condenar Saab.
De esta forma, se profundizan las expresiones de rechazo a la acusación por considerar que se trata de un secuestro que mantiene el gobierno de Joe Biden, luego de que trasladaron a Alex Saab, de manera ilegal, desde Cabo Verde donde ya era objeto de una detención irregular.
Hasta ahora, el alto funcionario lleva más de 550 días desde la captura arbitraria el pasado 12 de junio de 2020. Por esos motivos, se mantienen las denuncias en el ámbito internacional, tras un proceso empañado por la violación de derechos humanos y carente de legitimidad.
Ante ese panorama, el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro ha ratificado su respaldo y determinación en la defensa del diplomático. Por otra parte, ha reiterado que la actuación de la Casa Blanca en el caso representa «una puñalada mortal» al proceso de diálogo que se desarrollaba en México.
