El 6 de agosto de 1945 Estados Unidos lanzó sobre Hiroshima la primera de 2 bombas atómicas contra de Japón; 3 días después la ciudad de Nagasaki corría con la misma “suerte”.
Hoy se cumplen 75 años del ataque nuclear ordenado por Harry S. Truman, presidente de la Unión Americana. Aquel día, la bomba de uranio «Little Boy» cambió no solo a Japón, sino la historia del mundo entero.
¿Qué pasó en Hiroshima y Nagasaki?
El lunes 6 agosto de 1945, una explosión en punto de las 08:15 paralizó a todo el mundo, pues la bomba Hiroshima afectó en demasía al país asiático. El Coronel Paul W. Tibbets, de 31 años, fue el encargado de pilotear la nave que lanzó esta bomba atómica.
Tres días más tarde y cuando Japón aún no había sido capaz de reaccionar ante el desastre de Hiroshima, Estados Unidos lanzó otra bomba atómica sobre otra ciudad, ahora en Nagasaki; ésta con el mismo impacto.
¿Porqué se lanzaron las bombas?
#HoyEnLaHistoria Hace 73 años Estados Unidos arrojaba la primera bomba atómica sobre la ciudad de Hiroshima. Fue bautizada “Little Boy” y liberó el equivalente a 12.500 toneladas de TNT. https://t.co/Wc2KPfPV4I pic.twitter.com/AJggR0HrvU
— History Latinoamérica (@HistoryLA) August 6, 2018
Estos hechos tuvieron lugar en el contexto de la Segunda Guerra Mundial. El conflicto que enfrentó a las potencias del Eje, Alemania, Italia y Japón, entre otros; con los Aliados, liderados por el Reino Unido, la Unión Soviética, los Estados Unidos y China.
Truman dirigió los ataques contra el Imperio de Japón, enemigo de los Aliados en la disputa. Después de la derrota de Alemania, buscaba que los japoneses se rindiesen rápidamente para terminar con el conflicto, un mes después del ataque, la devastación impulsó la rendición de Japón.
La bomba atómica y sus efectos.
Las dos armas atómicas, las únicas utilizadas hasta el día de hoy, dejaron más de 200 mil muertos debido a la radiación y, en décadas posteriores, sumaron 400 mil decesos más por problemas de salud relacionados con las bombas, de acuerdo con datos de la ONU.
Muchos de los supervivientes de los ataques nucleares se conocieron como ‘hibakushas’, que literalmente significa “persona bombardeada”, y sufrieron múltiples enfermedades y defectos físicos provocados por la radiación, como cáncer.
Además, fueron víctimas de discriminación en su país, porque muchas personas pensaban que las enfermedades derivadas del bombardeo podrían ser contagiosas.
Luego de 75 años seguimos sin lograr el objetivo
El Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres; recordó que el nacimiento de la organización ese mismo año está ligado para siempre a la muerte sembrada en Hiroshima y Nagasaki con las armas letales.
“Desde sus primeros días y resoluciones, la Organización ha reconocido la necesidad de eliminar por completo las armas nucleares. Sin embargo, seguimos sin lograr ese objetivo”, dijo Guterres.
Luego de 75 años, parece que la humanidad no ha entendido que poseer armas nucleares disminuye la seguridad en vez de reforzarla. Hoy, un mundo sin esas armas «parece alejarse más y más de nuestro alcance”, lamentó Guterres.
A pesar de que los efectos de dichas bombas persisten hasta la fecha, el mundo no sólo no se ha desecho de esas armas, sino que ha aumentado su arsenal.