La Caracas de siempre está cumpliendo hoy 456 años de haber sido fundada por el conquistador Diego de Losada, el 25 de julio de 1567, cuando habían transcurrido 69 años de haber llegado Cristóbal Colón, por la población de Macuro (estado Sucre), el 2 de agosto de 1498. En esta Caracas nacieron el Precursor Sebastián Francisco de Miranda, el Padre Libertador Simón y los dos grandes de las letras Simón Rodríguez y Andrés Bello, entre otras celebridades venezolanas, de las cuales no podemos obviar a Juan Antonio Pérez Bonalde, ese celebre poeta que vino a la vida el 30 de enero de 1846 y falleció el 4 de octubre en La Guaira. Fue gran poeta y traductor, considerado como el máximo exponente de la poesía lírica de Venezuela. De Pérez Bonalde se recuerda cuando dijo poéticamente “Caracas allí está, sus verdes lomas/sus techos rojos y sus bandas de tímidas palomas/hacen nublar de lágrimas mis ojos…”.
A los 11 años de su fundación, en 1578, Juan de Pimentel trazó un mapa plano de la provincia de Caracas, en el cual quedó establecido que la ciudad estaba situada entre las quebradas de Catuche, Caroata y el río Guaire. Para ese entonces “los solares de las casas medían 70 varas en cuadrado y la anchura de sus calles era de 72 pies, esta era la ciudad de Santiago de León de Caracas en su fundación”, según nos dejó establecido Carmen Clemente Travieso, una dama del periodismo y militante revolucionaria de aquellos años posteriores al gomecismo en uno de sus extraordinarios libros, titulado Anécdotas y leyendas de la vieja Caracas, editado por el Concejo Municipal del Distrito Federal en 1971, cuando se estaba cumpliendo el sesquicentenario de la Batalla de Carabobo.
Carmen Clemente Travieso fue biznieta de Lino de Clemente y Palacios, quien fue el primer secretario de Guerra y Marina de Venezuela, por lo que es considerado el primer titular del despacho de la Defensa, cargo ocupado actualmente por Vladimir Padrino López, designado al efecto por el presidente Nicolás Maduro. Por cierto, que dicho libro fue prologado por el abogado Ernesto Silva Tellería, quien en las líneas finales de su escrito dejó sentado lo siguiente: “Carmen Clemente Travieso, en sus deliciosas páginas, acerca del pasado caraqueño, donde con pluma aguda y hondo sentimiento nativo, dejó trazada la historia de la ciudad que la viera nacer. Quienes lean las hermosas páginas que integran el presente volumen, harán un viaje espiritual a través de una ciudad que sus ojos no podrán ya conocer jamás”.
ANTONIO MANRIQUE
ÚN.