Este jueves, un grupo de policías armados atacaron la residencia privada del Primer Ministro de Haití, Ariel Henry, en señal de rechazo a la indiferencia de las autoridades por la muerte de agentes a manos de grupos armados, en lo que va de mes.
El ataque a la residencia de Henry, ubicada en el sector Delmas 60, en Puerto Príncipe, dejó solo daños materiales, según informan medios locales.
Las manifestaciones se han intensificado tras la muerte de 7 policías en Savien, en el departamento haitiano de Artibonite; elevando a 10 el número de agentes muertos de manera violenta en las últimas 2 semanas.
Vías bloqueadas
La tensión aumenta al punto de que los protestantes levantaron barricadas y quemaron cauchos en el Aeropuerto Toussaint Louverture de Puerto Príncipe, para impedir el aterrizaje del avión que trae de vuelta al país al primer ministro; luego de su participación, el pasado el martes en la Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
Cabe destacar que, en 2022, unos 55 agentes fueron asesinados en el país. Haití está inmerso desde hace años en una crisis sociopolítica y económica, que se agravó con el magnicidio, en julio de 2021, del entonces presidente Jovenel Moïse.
Violencia al máximo nivel
La Organización de las Naciones Unidas (ONU), alertó sobre la violencia armada en Haití, asegurando que alcanza su nivel más alto en décadas.
Asimismo, la ONU destaca que entre las principales causas está el flujo ilegal sin precedentes de armas desde Estados Unidos, por lo que exigen a Washington acciones contundentes al respecto.
“No hay más tiempo que perder, la situación de seguridad puede empeorar en cualquier momento”, aseguró ante el Consejo de Seguridad de la ONU el embajador haitiano, Antonio Rodríguez; quien a su vez pidió acciones a corto plazo para restaurar la seguridad del país.