Rumbo a cumplirse 3 años desde aquella autoproclamación en una plaza pública como supuesto presidente encargado de Venezuela; el exdiputado Juan Guaidó y el grupo de extrema derecha que lo acompaña, ahora insisten en autoratificar la continuidad del “interinato”.
Así lo declararon algunos voceros de la rama guaidosista de la ultraderecha, al afirmar su determinación de seguir con las maniobras a través de un grupo que se declara vigente, desde la Asamblea Nacional electa en 2015, cuyo ciclo terminó en 2020.
Integrantes de facciones de movimientos políticos como Causa R, Encuentro Ciudadano, COPEI, Voluntad Popular y Proyecto Venezuela; se pronunciaron para justificar el planteamiento de extender el ejercicio del parlamento que feneció en diciembre de 2020 y de la “presidencia” de Guaidó.
Una de las exdiputadas que se refirió al tema es Delsa Solórzano, quien valoró la opinión de los gobiernos de derecha que desconocen al presidente Nicolás Maduro como motivo suficiente para decidir cómo funciona la institucionalidad nacional.
“El mundo dijo que Maduro no era presidente. Los 60 países democráticos del planeta dijeron todos lo mismo; en consecuencia el presidente legítimo de la nación es el presidente de la Asamblea Nacional. Eso fue declarado en 2019″, señaló Solórzano.
Parlamento ilegal
Con estas declaraciones, los exdiputados de la Asamblea Nacional correspondiente al período 2015-2020, reinciden en su falta a las leyes del país, toda vez que ratifican la supuesta validez de su papel como legisladores, por encima de la elección del 6 de diciembre de 2020, mediante la cual se instaló el nuevo Parlamento el 5 de enero de 2021.
Incluso, las maniobras del grupo dirigido por Guaidó ha tratado de sustentarse sobre la base del denominado Estatuto Democrático; un documento implementado por la propia ultraderecha que determina que el supuesto interinato finaliza el 5 de enero de 2022.
“Si se extingue el estatus del presidente interino, se estaría favoreciendo a Nicolás Maduro“; manifestaron los partidos oposicionistas que apoyan la continuidad de facto de la AN electa en 2015 y la figura del presunto “presidente encargado”.
El pronunciamiento divulgado por esos sectores políticos reitera que “por lo tanto, para avanzar en la transición venezolana, se debe preservar el estatus de presidente interino y el mandato de la Legislatura IV de la Asamblea Nacional hasta que las negociaciones políticas allanen el camino para organizar elecciones libres y justas”.