La que está por terminar fue una semana de nuevas agresiones a Venezuela, que invitan a pensar que los enemigos han activado en el espectro una fase superior y más ácida de ataques; tal como lo denunció el presidente Nicolás Maduro la tarde de este viernes. En ese sentido, se han producido rechazos, omisiones y apoyos de esas acciones orientadas a romper con la paz venezolana; y entre los apoyos hay incluso quienes son corresponsables, pues sus días transcurren entre clamores de sanciones, invasión y bloqueo.
En el amplio grupo de quienes han manifestado su repudio a la política imperial, está el primer vicepresidente del PSUV, Diosdado Cabello. En su cuenta en la red Twitter escribió este 18 de septiembre: “quienes hoy justifican las agresiones hacia nuestra Patria (…) desconocen el valor y las luchas de este Pueblo”. “Además abren el camino para q les hagan lo mismo en un futuro. Nosotros Venceremos”, sumó.
Cabello consideró que la justificación puede darse “bien sea guardando silencio, avalando informes amañados o atacándonos”.
Informe inconsistente y por encargo
Esta semana una de las agresiones consistió en la publicación de un informe, según el cual el Gobierno del presidente Nicolás Maduro viola derechos humanos fundamentales. El referido documento de 444 páginas fue elaborado por la llamada Misión Independiente de Determinación de Hechos en Venezuela del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas (ONU); creada en 2019 con el rechazo de la Cancillería venezolana.
En él se habla de ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzadas, detenciones arbitrarias; “y otros tratos crueles, inhumanos o degradantes cometidos desde 2014”. Las conclusiones de la misión son la resulta de la contratación de unas empresas panameñas y de unas supuestas llamadas telefónicas; jamás pisaron territorio venezolano”.
No han sido pocas las voces que denuncian que se trata, una vez más, de un informe viciado, plagado de inconsistencias, en la ruta venezolana hacia la cita electoral del próximo 6 de diciembre. Alertan que ha sido instrumentalizado como excusa para que la Unión Europea anuncie que no será acompañante internacional del proceso electoral parlamentario venezolano; y qué casualidad que esa es una de las condiciones de cierta oposición que aún se debate entre medirse o no en las urnas.
Destaca además que 5 millones de dólares habría costado este informe no tan independiente como se ha pretendido vender; y que operadores detrás tienen vínculos con la dictadura de Augusto Pinochet en Chile; es el caso del abogado Francisco Cox.
“Miren cómo derrochan el dinero de los Estados miembros de ese cuerpo que dice estar en muy mala situación económica”, dijo el Canciller venezolano en una conferencia de prensa este sábado. Agregó que un grupo de países pretende sin moral venir a calificar a Venezuela en materia de derechos humanos.
Variante jurídica de Gedeón
“Es la variante jurídica de la operación Gedeón contra Venezuela (…) Van tras los mismos objetivos (…) Es un fraude y es un monumento de la propaganda de guerra(…) Con una metodología fuera de rigor”, sumó Arreaza.
También expresó que es una reedición del informe de Luis Almagro de 2018, “para perturbar el diálogo interno y perturbar el rol internacional de Venezuela”. “Desprestigia mucho a Naciones Unidas”.
Pero además, resulta curioso que se haya dado esta publicación en momentos en los que el Gobierno de Maduro está trabajando de manera coordinada con la Oficina de la Alta Comisionada para Derechos Humanos de Naciones Unidas, Michelle Bachelet. Esta además tuvo la oportunidad de estar en Venezuela y tuvo la posibilidad de reunirse con diversos factores en la nación suramericana.
¿Cuál es el objetivo último? ¿Acaso forzar a un cambio de gobierno o allanar el camino para una intervención?